Good morning,

Martes 24: pues como niñera que soy me ha tocado cuidar a la niña. Por cierto, hace un tiempo horrible.

Miércoles 25: hoy más de lo mismo de ayer. Vivir y trabajar en el extranjero es una experiencia única y vibrante pero eso no significa que cada día tenga que ser una aventura, también hay días normales y cotidianos.

Jueves 26: he pasado una mala noche y, con motivo. Al despertarme, he empezado a ver grantios everywhere, así que es un honor y un orgullo decir que tengo varicela, chicken pox. Pero no todo son malas noticias: por fin tengo el libro Eclipse de la biblioteca, hacía semanas que lo estaba buscando, y tengo una camiseta nueva. Hehe.


Viernes 27: se podría clasificar como uno de mis peores días. Tenia un dolor en la espalda mortal, fiebre, mareos y empezaba a sentir algunos picores. Pero todo esto debía permanecer a un lado porque me tocaba a trabajar, así que hice tripas corazón, y para adelante.

Sábado 28: hoy tengo fiesta, por lo que aprovecho para recuperar energía, ¿cómo? Pues no hay mejor forma que dormir y dormir.

Domingo 29: aún me encuentro mal, tengo bastante fiebre y en la lengua también tengo como granitos. Así que me voy al hospital, así de paso hago feliz a mi madre, a haber que puedo hacer. Debo coger un bus, aunque parezca mentira es el primero que cojo sola, y me dirijo hacía Broomfield, dentro de Chelmsford. El hospital es precioso y nuevo pero no me encuentro en el estado de apreciarlo ni sacar fotos por eso os he buscado esta fotografía. Allí me dicen que no preocupe que a veces ocurre, así que me vuelvo más tranquila.

Lunes 30: la hostmother me ha dado días de descanso, así que sigo con mi horario de: dormir, descansar, beber agua, beber más agua, dormir, paracetamol, comer algo, descansar, leer, agua...